La Gobernadora de Punilla, Pía Sandoval, encabezó la actividad de inauguración de las obras de revestimiento, aforador y telemetría. En la ocasión, se destacó la importancia de mejorar la infraestructura hídrica en los tramos donde la pérdida de agua es significativa y continuar incorporando nuevas tecnologías para una correcta distribución del recurso hídrico.
Ñiquén, jueves 3 de diciembre de 2020.- Hasta el sector de Huenutil del Peumo de la comuna de Ñiquén llegó la Gobernadora de Punilla, Pía Sandoval, el seremi de Agricultura, Juan Carlos Molina, el Coordinador Zonal Ñuble-Biobío de la Comisión Nacional de Riego (CNR), Javier Ávila, y el Alcalde de Ñiquén, Manuel Pino, para inaugurar el revestimiento y construcción de aforador con telemetría del canal Matriz Ñiquén.
La obra, que tuvo un costo superior a los $90 millones, fue bonificada por la Ley Nº18.450 de Fomento al Riego y Drenaje por un monto aproximado de $78 millones y consiste en más de 100 metros de longitud de revestimiento en hormigón armado y la construcción de un aforador con telemetría, que beneficia el riego de 198 agricultores.
“Cuando hablamos de cuidar el agua, no solo nos referimos a su acumulación y aplicación final, también debemos preocuparnos de su conducción y distribución y esta obra apunta precisamente en esta dirección, ya que la tecnología brindada por el aforador con telemetría permitirá a la organización de regantes distribuir con mayor exactitud las aguas de acuerdo con derecho”, señaló Javier Ávila, Coordinador Zonal de la CNR.
Por su parte, la Gobernadora de Punilla, Pía Sandoval, señaló que “las obras de riego no sólo permiten hacer frente a la escasez hídrica, sino que también contribuyen a la reactivación económica, incluyendo la generación de mano de obra. Por esta razón, el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera ha destinado un presupuesto histórico para riego, por lo que esperamos continuar inaugurando en nuestra provincia y nuestra región más obras como éstas”.
A su vez, el Seremi de Agricultura, Juan Carlos Molina, señaló que “cuando un canal se reviste, lo que se logra es evitar la significativa pérdida de agua en un sector determinado, para que el recurso llegue efectivamente a las tierras de los agricultores y si a esto sumamos la tecnología como; telemetría, aforadores y compuertas automáticas, los regantes logran distribuir de mejor forma el recurso hídrico y esta obra conjuga ambos aspectos, por lo que este tipo de proyectos apunta en el camino correcto que es la mejor utilización del recurso agua, lo que sumado a la tecnificación del riego, nos permite producir más alimentos con cada vez menos agua, que es lo que nos pide hoy en día el mundo a los agricultores”.
El Alcalde de Ñiquén, Manuel Pino, destacó la tecnología asociada a la obra inaugurada: “acá no solo estamos hablando de revestir el canal, sino que también ahora se pueden medir a distancia y con exactitud los flujos del agua y eso es un tremendo avance, porque es el primer aforador de este tipo que tenemos en Ñiquén y creemos que este es el inicio del presente y del futuro para el buen uso del agua de los pequeños agricultores de nuestra comuna”.
Carlos Salinas es el presidente de la Asociación de Canalistas del Canal Matriz Ñiquén y afirmó estar agradecido de las autoridades, “que han hecho posible esta obra tan importante para nosotros, ya que por un lado se ha logrado evitar una enorme pérdida de agua que se producía en este sector y por otra parte con la tecnología logramos tener información veraz y oportuna de lo que está sucediendo en un momento dado en este punto del canal, lo cual es una gran garantía para los regantes en cuanto a la distribución de las aguas”.
Una organización que nace en 1978
La Asociación de Canalistas del Canal Matriz Ñiquén tiene su origen en el año 1978 y hoy cuenta con más de 700 usuarios, de los cuales el 80% de ellos son pequeños agricultores.
El canal matriz conduce 4536 litros/segundos distribuidos por más de 40 canales. Las aguas son de un origen mixto, siendo un 55% obtenidas desde el embalse Digua y el resto de los ríos Perquilauquén y Cato.
Los cultivos regados con estas aguas son principalmente el arroz y cultivos tradicionales como el trigo y chacras. En los últimos 8 años han aparecido variaciones en el paisaje, con la introducción de algunos cultivos de tipo permanente como son los avellanos y otros frutales como los arándanos y cerezos, entre otros frutales. No obstante, aún son poco representativos de la agricultura de Ñiquén poniente.
